viernes, 25 de marzo de 2011

24 de marzo 2.011 en Gualeguay

Ayer a las 19 hs. en el acto donde se inauguró un "monumento" a la "memoria" en Gualeguay, me hice presente para espera al Intendente Luis Erro.
Antes de que comience el cirKo, me acerqué para entregarle en mano una carta, dictada por esa señora especial llamada "Conciencia".
Como le dije a Luis, no podría dormir tranquilo si me hubiera callado la boca.


Gualeguay, 24 de marzo de 2.011
Dr. Luis Erro
Estimado Intendente

En este lugar, los vecinos de Gualeguay quisieron un día, recordar con un busto y una placa el asesinato del General Pedro Eugenio Aramburu.
Aramburu fue secuestrado, ejecutado, y su cadáver tapado con cal, por un comando de terroristas argentinos autodenominado Montoneros.

Lo asesinaron el 1 de junio de 1.970. Le pusieron un pañuelo en la boca, lo apoyaron contra una pared del sótano, y Fernando Abal Medina, miembro del citado grupo terrorista, lo ejecutó con un tiro en el pecho. Luego le dieron dos tiros de gracia.

Hoy, las autoridades de Gualeguay, en este acto que usted preside, han optado por retirar el busto que recordaba el asesinato del General, y levantar en el mismo lugar un “Monumento a la Memoria”.

Desde mi humilde sentir, creo que si el Monumento que hoy se levanta, no comprende a los más de 1.500 argentinos (hombres, mujeres, chicos, grandes, civiles y militares) asesinados por los terroristas argentinos de los años 60 y 70, más que un homenaje, parecerá una revancha avivada por viejos rencores de los que siempre militaron (por conveniencia) en el odio.

Pues derribar un hito para erigir otro que no comprenda al primero, es sumarse a la actitud mezquina de los que pretenden contar una parte de la historia, escondiendo otra.

Comprender y asumir nuestra historia, nos hará más libres que intentar silenciarla por decreto o resolución.
Necesitamos los argentinos una Reconciliación definitiva con nuestro doloroso pasado reciente… y para eso, el futuro debe comprendernos a todos. No podemos hipotecarlo con los rencores caprichosos de los que necesitan, para gritar su “verdad”, callar la “verdad” del otro.
Digo Reconciliación y no digo impunidad. Creo que debe haber Justicia y Verdad y Memoria… pero para TODOS.

Cristiano al fin, rezo para que en un futuro no muy lejano, nos reunamos en torno al monumento de una “Memoria” que no olvide a NADIE.

Disculpe usted el momento del reclamo, tal vez inoportuno… pero no quería callar cómplice, lo que me grita la conciencia.

Atte.
Horacio R. Palma

5 comentarios:

Sandro Dal Bosco dijo...

Gracias Horacio, me parece de muy buen ser humano siempre luchar por lo que sabemos que es justo, sin indultar ni descalificar a nadie, todos los reclamos deben ser escuchados y el tuyo es un reclamo LEGITIMO.
Yo, como victima del terrorismo al que vos haces mencion, en nombre de mi padre Rino, solo tengo palabras de agradecimiento.
Solo Dios sabe porque nosotros, ademas de sufrir el dolor por la ausencia de un ser querido, debemos ahora padecer este olvido cruel el cual nos hace comprometer aun mas con el deber de divulgar la verdad de los hechos.
Un abrazo y hasta siempre

Horacio Ricardo Palma dijo...

Gracias Sandro... no debemos callar nunca la otra parte de historia. NUNCA.
Siempre con las Víctimas del terrorismo de Argentina...!!

Anónimo dijo...

Palmeta...¡seguí sangrando por la herida del orto!

Anónimo dijo...

Orteño! Que pasó con Julio López? Confesá cobarde!

Viva el "Altar a la Patria" proyectado por López Rega, mucamo y secretario privado del general, en la Avda. Figueroa Alcorta... también Ministro de Acción Social, de Cabo a Comisario General de la Policía Federal, Jefe de la Triple A, Hesotérico, etc., etc. Todo ello gracias al apoyo y decisión de Juan Domingo Perón. QEPD!

Anónimo dijo...

Lo de la herida de sus ortos ya no es un sangrado. Es una verdadera hemorragia!!!!