martes, 14 de agosto de 2012

Firmenich, el asesino tiene quién lo defienda


Carta de Lectores
Diario La Nación 

"Quisiera aclarar un concepto del juez Ariel Lijo en su sentencia sobre el asesinato del sindicalista José Rucci. Lijo critica que en la versión original de mi libro Operación Traviata, ¿quién mató a Rucci? incluí un dato erróneo sobre la dirección del departamento utilizado por los atacantes como cuartel general. Oculta que ya reparé ese error: el 13 de diciembre de 2011 fui a su juzgado y le aporté la dirección exacta. ¿Qué hizo Lijo con ese nuevo dato? Ni siquiera citó a declarar a las personas que podían corroborarlo. En realidad, no citó a nadie que perteneciera a Montoneros, como, por ejemplo, a Mario Firmenich, a pesar de que dio por «acreditado» que la tarde del atentado Firmenich «refirió que la autoría del crimen le correspondía a dicha organización». Tampoco citó a un ex funcionario clave de la gobernación de Buenos Aires, a quien, sin embar
go, le dedica varios párrafos. Y eso que critica a sus antecesores por no haber recabado «pruebas de trascendental importancia, como las declaraciones de testigos de la época».

"Lijo no ha aportado nada propio a la causa a pesar de que tiene muchos más recursos que un periodista: puede citar a testigos, ordenar allanamientos, recabar el auxilio policial, etcétera. En casi cuatro años, lo único que hizo fue corroborar que el asesinato fue realizado por Montoneros en el marco de una disputa con Juan Perón, es decir, la hipótesis principal de mi libro. Ni la Triple A ni la CIA; como fueron los Montoneros, concluye a tono con el oficialismo en que no fue un delito de lesa humanidad y que ya prescribió.

"¿Se podía esperar algo más?"

Ceferino Reato 
cefereato@yahoo.com

2 comentarios:

capitan futuro dijo...

reato no es testigo del hecho ¿Que salta? un libro es una version de un hecho, no LA VERDAD del hecho

Anónimo dijo...

Entonces que les avisen en los juicios que no pueden presentar los libros de Verbitsky como prueba.