Ni hablar.
Entrismo puro. Entrismo con el poder del Poder en sus manos por casi una década
y entrismo con el Poder de poderoso Don Dinero.
Eduardo Navascués, Soldado conscripto herido de La Tablada
“Negrito,
tuve que vender…” contó González Oro al aire en su programa de Radio 10 con la
voz entrecortada. Es que esta semana se confirmó lo que era un secreto a voces:
El más aventajado empresario Kirchnerista, Cristóbal López, compró finalmente
gran pare del Grupo de multimedios de Daniel Hadad en casi 50 millones de
dólares.
Todo
parecido con el Menemismo no es para nada casualidad.
El
Modelo Kirchnerista necesita imperiosamente "palenque ande ir a rascarse"… caja
para sostener el festival de populismo salvaje, no aceptar preguntas por las
incomodidades que éstas conllevan… y la necesidad indeclinable de un relato
único. De gente fanatizada que se encolumne detrás de la mentira oficial.
Este
sábado el Tono Fiorotto lo pedía desde el programa radial que la Municipalidad
de Gualeguay tiene en Radio Gualeguay. El Tono no lo dijo con sus palabras sino que utilizó las de una persona
capaz e inteligente como Discépolo. “Dale vení… o tenés miedo de convencerte?”
Está
bien el proselitismo y están bien los fanáticos, si es que no llegan a perder
la cordura como sí lo hicieron en épocas de sangre terrorista. Pero lo que
inquieta… lo que preocupa es que desde el pensamiento oficial Kirchnerista se ha
desatado una guerra voraz por denostar a todo aquél que piensa distinto. ¿Acaso
las diferencias no son la esencia la democracia, esa democracia que a cada paso se les cae
de los bolsillos… perdón, de la boca?
Si
el régimen Kichnerista triunfara por fin en su lucha militonta de ir por todos
y por todas y por todo… ¿no sería ese el fin de la democracia?. Claro que sí... pero supongo que no les importa.
El
modelo fanático de los Kichner corre desdesperado y termina por morderse la
cola. En la supuesta búsqueda de más democracia, milita para llegar a un país sin disidentes ni
críticas ni siquiera una pregunta.
El
relato desesperado de este modelo, que pretende monopolizar ese relato para
cambiar la historia con mentiras, llega hasta la infamia. Y en el tren de la
desvergüenza viajan hacia la estación del papelón cotidiano.
Esta
semana la vida me cruzó con dos personas. Con dos vidas. Con dos historias de
una Argentina trágica. Con dos historias que el relato oficial intenta tergiversar.
El
miércoles estuve con Eduardo Navascués. Aquí es cuando usted se encoge de
hombros y dice… ¿ajá, y éste quién es?.
Eduardo
Navascués era soldado conscripto, y manejaba la ambulancia de su cuartel cuando el grupo
terrorista Movimiento Todos Por la Patria, un grupo fundado entre otros por
Enrique Gorriarán Merlo y el recientemente fallecido Eduardo Luis Duhalde
(Secretario de derechos humanos del régimen K).
Aquella
mañana del 23 de enero de 1989, gobernaba el Dr. Alfonsín. Y como todo acto
radical, aquél tiempo eran tiempos tibios. Tal vez por eso los terroristas
decidieron tomar el cuartel a sangre y fuego. Entraron armados hasta los
dientes, con el camión tiraron abajo el portón de entrada y aplastaron a un
soldado que barría el camino.
Eduardo
Navascués fue tomado de rehén por un grupo de aquellos asesinos terroristas que
intentaron aquella mañana derrocar a un gobierno democrático. Nunca se olvidará
de la cara ni de los modos de Claudia Bello, la terrorista que comandaba ese
pequeño grupo que lo tomó de rehén. Fusil en mano, la enajenada terrorista puso a Navascués y a otro soldado como escudo humano en la ventana. Con la más asquerosa sangre fría les apoyó su fusil en la espalda y comenzó a
tirar. “Nunca vi una persona tan mala… me animo a pelear con tres tipo como vos antes que con esa mujer” me confesó Navascués. Eduardo Navascués salió con heridas de
aquella ventana… su amigo descosido a balazos. Luego los terroristas lo
pasearon por medio regimiento mientras combatían con él como escudo. Escuchar
el relato de Navascués causa estupor. Siempre le agradece al suboficial Raúl García
que lo sacó del infierno…en un descuido de los terroristas, García pudo abatir
a su carcelero y escapar de la locura y de la muerte con su subordinado a salvo.
Nunca
el gobierno le pagó una aspirina. Nunca. Nunca el gobierno argentino lo llamó a
declarar. Es que a los pocos meses de aquél ataque terrorista, cuando salía de
su Mar del Plata natal hacia Buenos Aires para declarar… un sicario del MTP le
tiró un tiro a su camioneta y le atravesó la espalda. “Vas a morir” le habían
pintado en la pared de su casa.
El
relato oficial luego mutó. Indultó a los asesinos diez años más tarde. Y los
asesinos de La Tablada salieron en libertad y se presentaron en tribunales y
pidieron indemnización y denunciaron a Eduardo Navascués, soldado conscripto
chofer de ambulancia herido en el ataque terrorista y al que quisieron matar
para que no hablara, lo denunciaron por delitos de lesa humanidad. Eduardo es un
tipo simple con un alma machacada por tiros, esquirlas, amigos muertos, olvidos
e injusticias. Tiene un dolor más grande que el de todas sus heridas… y es
escuchar cada día el relato mentiroso de un gobierno que apaña a los
terroristas que aquella mañana se organizaron para matarlo a tiros… en eso,
solo en eso, fallaron.
Anibal
Gaviglio es un reconocido profesor de educación física en San Francisco,
Córdoba. Tiene 54 años y con su escuela asistió al acto de inauguración del
paseo de la memoria en su ciudad.
Cuando
comienza el acto, se escucha el relato ideológico de una historia contada a
medias.
Llegó
el momento en que la locutora comienza a nombrar a cada uno de los “detenidos desaparecidos”
de la ciudad, y por orden alfabético primero lo nombran a José Luis Boscarol, como
“víctima de la dictadura militar”.
Aníbal
Gaviglio es primo de Boscarol y conoce la verdad de la historia. Y la conoce bien porque nunca se la contaron, la vivió. Convencido de
que “nunca es triste la verdad, lo que no tiene es remedio”, levanta la mano en
pleno acto, se presenta en voz alta como familiar del médico que acababan de
nombrar, y cuenta cómo fue que murió su primo. “Lo de mi primo no fue un asesinato, sino que
murió en un accidente automovilístico en el año 74, no fue en la Dictadura”.
Efectivamente,
el médico J. L. Boscarol, miembro del grupo terrorista ERP, murió en un
accidente de auto al volcar su fíat 128 escapando de la policía tras el ataque
del ERP a la fábrica militar de Villa María, donde él era "posta sanitaria" (atendía terroristas heridos). En aquél acto terrorista, el ERP secuestró a Larrabure.
Tras
el “descaro” de Gaviglio al desenmascarar la mentira, Mirta Gallegos, esposa de
Boscarol y también ex miembro del ERP, denunció por todos los medios los dichos
de Gaviglio.
Mirta
Gallegos es miembro de una familia dónde su hermana, su cuñado y hasta su madre
pertenecían al grupo terrorista ERP.
El
profesor Gaviglio recibió una sanción verbal en su escuela. Curiosamente, no
por haber descubierto la mentira del relato que el ESTADO apaña con monumentos e "emolumentos" , sino por “haber interrumpido un
acto oficial”.
Estimado
lector, si un régimen de gobierno no tiene reparos en borrar la historia y
escribirla a su antojo. Ni reparos en mentir los hechos para justificar a los
asesinos y levantar sus letras en bronce… entonces… esperemos sentados a que nos llegue lo peor.
Pero
en ese momento, aclaro, no aceparé quejas de los que hoy callan cómplices ante las mentiras.
Horacio R. Palma
El Día de Gualeguay
Gualeguay
Entre Rios
4 comentarios:
"recibió una sanción verbal" siempre he opinado que las sanciones de los inmorales son medallas para los hombres decentes.
El que escribió la nota está pasado de sustancias ilegales. En Tablada no estuvo Claudia Bello, que en ese momento estaba en la campaña electoral de Menem. Sean un ooco serios
Claudia Lareu se hacía llamar dentro Claudia Bello. Además, cuentan los testigos que maltrataba a Roberto Felicetti, que temblaba y estaba inmóvil de miedo: "Puto, a qué mierda viniste cagón...". Pronto aparecerá una libo sobre La Tablada...a pesar de se un libro basado en el MTP, les recomiendo leerlo. Su autor será Felipe Celesia...
che aparte de palmita , la hija del comisario que defiende al cura pedofilo alguien mas apoya la causa pq hasta la chechu despues de la derrota de duhalde se deprimio y desaparecio , y bueno que se va a hacer palmita
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