Hoy es igual la forma de actuar y pensar que la de un guerrillero de los años 60/70, exactamente lo mismo sucede con su prédica de la revolución. Hay infinidad de puntos en común entre el Che Guevara y Bin Laden, fundamentalmente se trata de un movimiento generacional de jóvenes contra el sistema establecido. Son movimientos contestatarios , generalmente no les interesa el poder, no sabrían que hacer en función de gobierno. Por eso se los acusa de nihilismo, están en el mismo orden que los anarquistas.
El avance de la tecnología en el campo de las comunicaciones les permite hoy multiplicar sus redes a través de la difusión virtual de instrucciones y propaganda. Tenemos un modelo de origen en el que un intermediario que estuvo en el Líbano o Afganistán crea su pequeña célula, y el modelo actual en el cual ya no es necesario un intermediario, sino solo un grupo de jóvenes enojados con su familia, con sus profesores, con la policía o con todo el mundo, que se juntan a navegar en Internet, se enganchan con grupos subversivos internacionales, como lo fueron el E.R.P. o Montoneros, en los años 70, y saben que si hacen un atentado en su nombre serán famosos. Luego serán “reclutados por un mayor responsable”.
A mi modesto entender lo mismo ha comenzado a reeditarse en nuestro País. Observemos como ya entrelazados en la que denomino nueva U.R.S.S. (Unión de Repúblicas Socialistas Sudamericanas), se encuentran Cuba; Venezuela; Ecuador; Bolivia y Argentina. El poder visible lo muestran los respectivos presidentes. El poder real, los distintos equipos de subversivos reciclados en Ministros, Secretarios de Estado, Asociaciones de Derechos Humanos, O.N.G. varias, etc.
En nuestro País concretamente “Los Monaguillos” del gobierno o aliados a él, están en superficie, pero si “democráticamente” les va mal, “progresivamente” pasarán a la clandestinidad, o el propio ejecutivo endurecerá sus políticas de acercamiento hacia la cubanización o el castrochavismo.
Pido disculpas por el subtítulo de monaguillos, pues desde pequeño siento un profundo respeto por los monaguillos que ayudan a celebrar bautismos, comuniones, casamientos y misas. Vienen a mí recuerdos lindos, sanos, cuando con justa razón nos retaba con dureza un genovés enorme en todo sentido, Monseñor Eugenio Carubelli, del Sagrado Corazón de Jesús, mi parroquia de Lanús, cuando nos comíamos los recortes de las ostias, que con un sacabocado producíamos en la sacristía.
Concretamente me refiero a “Los Monaguillos” del Gobierno Nacional, los que al contrario de los verdaderos nada arreglan, mucho ensucian, en casos son ateos lo cuál no critico, pero si cuando practican el rencor y los conmueve el odio.
Nos dejó escrito, Jorge Luis Borges ...”Creo que todos los argentinos tenemos hoy un deber primordial inexcusable, superar recelos y administrar rencores para unirnos en la fé y la esperanza”... .
Poner las cosas bajo el grito imperativo, de aparente machismo y denigrar sin detenerse a verificar la razón que cada ciudadano posee, es por lo menos inaceptable. Lo que si denigra es la descalificación. Yo denigro al Poder Ejecutivo y a sus “monaguillos” en otros poderes, porque siento que movidos por sus ideologías de antaño, no califican para conducir los destinos de mi País.
Como ejemplo la Ministra de Defensa, a la fecha, Señora Nilda Garré, manifiesta a quien quiera oírla, que su cartera esta “extirpando” los focos de infección que se puedan apegar a fantasías antidemocráticas, o a reivindicaciones de planes criminales condenados por la justicia y la sociedad Argentina. Al escuchar estas voces se multiplican mis desesperanzas sobre el futuro, es bien evidente que van por más, son fundamentalistas. La señora Garré fue subversiva en los 70, alentó el ataque contra las personas y las Instituciones de la Democracia. Hoy hablan de “extirpar”, ayer otros políticos hablaron de “aniquilar”, luego a la larga o a la corta, los soldados de la Patria, de la institución que fueran, pagamos los costos de “extirpar” o “aniquilar”.Evidentemente necesitamos un cambio generacional de dirigentes políticos, gente nueva, ustedes son un accidente más en la vida de la República Argentina.
Nos han vendido, que a ciertas personas escogidas les es lícito matar en aras del ideal que la anima. Y esa decisión de matar a discreción, se hace especialmente feroz cuando una minoría quiere imponer a balas y bombas lo que nunca lograría con votos. Así actuaron los terroristas amigos de nuestros gobernantes y hoy creen haber cumplido con alcanzar el poder, deseo por el bien de todos que cambien de rumbo, o ese poder será efímero.
Jacques Alain Miller, dice: ...”El verdugo terrorista, ese sólo se autoriza a sí mismo, es un monaguillo, un ángel ansioso por despojarse de su cuerpo...para navegar maravillado a su patria eternamente espiritual”... .
NORBERTO COZZANI
C.P.F.Nº 1 EZEIZA
1 comentario:
Seguí sangrando por la herida de tu procesista orto
Publicar un comentario