domingo, 9 de mayo de 2010

Sábado 8 de mayo en la Feria del Libro de Buenos Aires

Ayer sábado 8 de mayo, Editorial San Pablo, junto con el grupo 70 veces 7, organizó una mesa redonda en la 36° Feria del Libro de Buenos Aires para pensar la Reconciliación de los argentinos con nuestra historia.
Fue en la Sala Roberto Arlt, y expusieron Mons. Carmelo Giaquinta, el Lic. Arturo Larrabure y el Licenciado Luis Labraña.
Cabe destacar que Arturo Larrabure es hijo del Coronel Argentino del Valle Larrabure, quien fue secuestrado y asesinado por el grupo terrorista argentino ERP.
Luis Labraña fue integrante del grupo terrorista argentino Montoneros
Les dejo los videos con las palabras de Monseñor Carmelo J. Giaquinta, es una clase magistral sobre el PERDÓN... disfruten, y difundan por favor.
Horacio R. Palma








6 comentarios:

Anónimo dijo...

Los argentinos somos protagonistas de un odio casi bicentenario entre hermanos, llenas están las páginas de nuestra historia de ejemplos de odios, pero el más feroz de los odios se desató entre Perón y la clase media, representada por la Revolución Libertadora, y que perdura hasta la actualidad con diversas formas.

Desde la primera dictadura peronista hasta nuestros días, la sociedad argentina ha vivido plena de odio: obreros contra patrones, pueblo contra militares, la izquierda contra la derecha, etc.

Si ese odio hubiera sido transitorio y relacionado a las circunstancias sería normal, pero al perdurar durante tanto tiempo se transformó en rencor, y llegó a ser patológico, invalidando la vida positiva, futura y de crecimiento de la Nación.

Hasta hace no muy poco se odiaba a los militares y a todo el que vistiera un uniforme de la república, por ese odio y rencor nos quedamos sin instituciones armadas y hoy somos un país indefenso.

Hoy se odia a los Kirchner y es tan grande el rencor, que somos un país donde las instituciones no se respetan entre sí.

Como dice Monseñor Giaquinta, solo el perdón nos permitirá alcanzar la Reconciliación Nacional. Y ese perdón no debe ser de un sector hacia otro o viceversa, debemos perdonarnos entre todos los habitantes de este país.

Debemos perdonar nuestro odio, nuestra arbitrariedad, nuestra intolerancia, nuestra corrupción, nuestra viveza criolla, nuestra soberbia y descaro… son tantas las cosas que debemos perdonarnos, que solo se puede encontrar el camino en el mismo evangelio: “el que esté libre de culpas, que arroje la primera piedra”.

Y como siempre es la Constitución Nacional, que no organiza jurídicamente, la que nos indica una luz en el camino, en la Primera Parte, Capítulo Segundo “Nuevos derechos y garantías” en dos artículos establece:

"Art. 39.- Los ciudadanos tienen el derecho de iniciativa para presentar proyectos de ley en la Cámara de Diputados. El Congreso deberá darles expreso tratamiento dentro del término de doce meses.
El Congreso, con el voto de la mayoría absoluta de la totalidad de los miembros de cada Cámara, sancionará una ley reglamentaria que no podrá exigir más del tres por ciento del padrón electoral nacional, dentro del cual deberá contemplar una adecuada distribución territorial para suscribir la iniciativa.
No serán objeto de iniciativa popular los proyectos referidos a reforma constitucional, tratados internacionales, tributos, presupuesto y materia penal".

"Art. 40.- El Congreso, a iniciativa de la Cámara de Diputados, podrá someter a consulta popular un proyecto de ley. La ley de convocatoria no podrá ser vetada. El voto afirmativo del proyecto por el pueblo de la Nación lo convertirá en ley y su promulgación será automática.
El Congreso o el presidente de la Nación, dentro de sus respectivas competencias, podrán convocar a consulta popular no vinculante. En este caso el voto no será obligatorio.
El Congreso, con el voto de la mayoría absoluta de la totalidad de los miembros de cada Cámara, reglamentará las materias, procedimientos y oportunidad de la consulta popular".

El odio bicentenario que siempre nos ha divididos entre realistas y republicanos, en conservadores y anarquistas, en peronistas y gorilas, en zurdos y fachos, en K y anti K, debe ser dejado de lado de una vez por todas.

El perdón debe solicitarlo la Nación toda, quién a su vez debe otorgarlo a través de sus representantes, los que poniéndose a la altura de las circunstancias deberán superar las antinomias que nos separan, consultar a la sociedad sobre ¿qué proyecto elige: desunión y rencor ó unión y pacificación?

Si la sociedad mayoritariamente elige la segunda opción, los políticos deben reconciliar al país en forma definitiva, para avanzar en el Siglo XXI hacia ese futuro de grandeza, siempre recitado y nunca logrado.

VADE RETRO SATANA!

Anónimo dijo...

Es de un gran pragmátismo el primer comentario. Si sé leer entre líneas, se propone:

1. Que la sociedad junte 1/3 de firmas del padrón electoral y eleve un proyecto a la Cámara de Diputados, solicitando una Consulta Popular.

2. La Consulta Popular, solo debe conestarse con un SI o un NO.

3. La Pregunta sería: ¿Desea usted el perdón de la sociedad y la Pacificación Nacional Definitiva, perdonando a TODOS los que nos violentaron?

4. La Cámara Baja debería impulsar, por simple mayoría, la Consulta Popular Vinculante.

5. Una vez efectuada la Consulta Popular, TODA la Nación debe acatarla. No hay VETO posible y el proyecto se transforma en Ley automáticamente.

De esa manera, se cumple con la voluntad de la mayoría de la sociedad, y se acaba con el odio, la pelea permanente y TODOS JUNTOS no podemos dedicar a hacer de la REPÚBLICA ARGENTINA un gran país.

¿Qué más le podemos pedir a la democracia? Es el camino: que la mayoría se exprese y se acata el resultado sin chistar. Sería una solución histórica a un problema que se ha querido judializar.

Argentinos... a las cosas, basta de SANATA! Como diría el Gran Fidel... PINTOS!

apitan futuro dijo...

No sean caraduras, si hay una pregunta para consulta popular es: ¿Se deben terminar los juicios por violaciones a los derechos humanos en argentna e indultar a los condenados?
A ver si pasan esa.
Se las dejo.
Desde ahi ustedes pueden disputan que los delitos de las organizaiones armados son de lesa humanidad y no prescriben ¿Quieren? ¿Lo impulsamos? creo que la respuesta de toda la sociedad a estas dos preguntas es un NO...

Anónimo dijo...

Disiento con usted, si realmente existe la igualdad ante la ley la pregunta debería ser:

¿Se deben juzgar también a los terroristas asesinos que crearon la violencia en el país? Tengo la plena seguridad que la mayoría silecionsa del país, votaría con un rotundo: SÍ.

Entonces producido el juzgamiento de todos los involucrados en la guerra revolucionaria y contrarrevolucionaria (acción y reacción), condenados por la justicia... no queda otro camino que el perdón, reconciliación y amnistía para lograr la Pacificación Nacional Definitiva.

Caso contrario estimado forista, continuaremos en el camino de odio que destila su irónico comentario.

También dejen de afanar. Gracias!

capitan futuro dijo...

en ningun lugar del codigo penal argentino esta esta categoria de reaccion y contrareaccion a la qeu usted se refiere. Un delito es un delito (eso es lo que ustedes suelen decir por aca) solo salvable en caso de legitima defensa, la cual se toma generalmente en casos particulares, ya que no se puede hablar de legitima defensa en situaciones de guerra. Si fuwe una guerra como dicen ustedes, ya esta, se dirime en el campo de batalla y gana el que gana. En los estrados se dirimen otras cosas. La pregunta que propone es tramposa, pero ademas no esta en discucion si se deben juzgar o no los delitos de las organizaciones armadas, claroq eu acuerdo, el tema es que muchisimos de los reponsables no pueden ser juzgados ya qeu estan en las fosas comunes que los ilustres genocidas argentinos crearon. El otros son las categorias (discutiblesa, pero que son) de delitos de lesa humanidad. los delitos de las organizaciones armadas prescribien, porque son de gentes comunes. los cometidos desde y por agentes del estado no, justamente porque son ellos los que deben velar por las leyes y la constitucion, sea el marco politico y sociel que sea.
Pero, ademas, ustedes lo qeu quieren plesbicitar es el freno a los juicios a los represores. Salteemos la burocracia y de una ves lancemos la pregunta: ¿Se deben terminar los juicios por violaciones a los derechos humanos en argentna e indultar a los condenados?
Eso es lo que ustedes quieren. No quieren juicios a las organizaciones armadas, quieren el status quo que se propuso desde 1995 en adelante: impunidad.

Anónimo dijo...

Mire evidentemente usted debe ser de otro planeta, voy a tratar de ser claro: una guerra, es una guerra y no se la puede juzgar con el Código Penal... esa es una aberración jurídica.

Para que no tenga dudas si ¿fue o no una guerra? por favor consulte a Mario Firmenich (a) Pepe, si no lo ubica le paso el siguiente link de un video para que vea y escuche a distintos dirigentes guerrilleros que se refieren a este tema:

http://www.youtube.com/watch?v=Gjp7Gwi6wX0

Es muy simple y claro. Si no superamos estas diferencias continuaremos siendo 'los enanos de la historia', póngale el nombre que quiera... pero no se puede, ni debe juzgarse a un solo bando y con el Código Penal. Por favor vea este video. Gracias!