viernes, 18 de septiembre de 2009

Así mataba el terrorismo en Argentina...

Carta de un amigo.

El diario “La Nación” en su edición dominical del 6 de agosto de 2000, en su suplemento Revista, publicó la siguiente carta
“Se llamaba Jorge”
“Se llamaba Jorge Sarlenga, tenía 30 años y era abogado. Sin trabajo por algún tiempo, consiguió, para “su desgracia, un empleo en la empresa Bendix. Lo nombraron jefe de personal. Jorge, amigo de mis “hijos, era un muchacho sano, normal, que solamente quería forjarse un porvenir en un trabajo decente. “No tenía sueños extraños, no aspiraba a que algún día no fueran necesarios los gobiernos, porque no era “un anarquista trasnochado, tampoco un lacayo del imperialismo, era sólo un empleado de una “multinacional, con 15 días de antigüedad; digo bien sólo 15 días. “En enero de 1976 ingresó a su lugar de trabajo un grupo de jóvenes idealistas y pensantes con la “intención de matar al presidente de la empresa, ese asqueroso representante del capitalismo yanqui, pero “se encontraron con que éste no estaba presente en el lugar. Entonces, quizá en un rapto de idealismo, “lo ametrallaron a Jorge. Lo asesinaron porque sí. Fue una víctima de recambio. Era un inocente, pero así “era la justicia del pueblo” en esos días. No lo olvidemos nunca.“No tenía una noviecita que llorara por él, pero sí una madre. Hoy la casa en que vivía está vacía, porque “su madre también murió.
Murió de pena.”
Jorge H. Dotto
DNI 5.106.242

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Fue una guerra Palma. Y en la guerra hay bajas, por eso no lloramos a nadie, ni a Floreal Avellaneda, porque para nosotros la guerra sigue.
No perdonamos
No nos reconciliamos
No olvidamos

Manuel Baldomero Ugarte
soloundemonio
larednergal

Horacio Ricardo Palma dijo...

Estoy de acuerdo con usted Sopenco... fue una guerra...y siguen en guerra.
Abrazo

Anónimo dijo...

Efectivamente fue una guerra contrarrevolucionaria limitada, pero los derrotados por las armas insisten que solo eran "jovenes idealistas" y pidieron, como cobardes que son, que los vencedores fueran juzgados por el Código Penal.

En ese proceso se cometieron las mayores aberraciones jurídicas, tales como: leyes retroactivas, sacarlos de juez natural, ignorar leyes sancionadas por el Congreso Nacional y podemos continuar enumerando un montón de dislates en la que estos cobardes se escudaron.

Hoy pretender importar la revolución blovariana del "loro tirano y venezolano" para cometer el mayo "afano de la Argentina". Ejemplos sobran por doquier. ¿Quiere que se los enumere? Mi estómago no resiste tanta mierda.

Vade Retro Satana!

Horacio Ricardo Palma dijo...

Gracias Sopenco...sí...ya se que además son laje agustín, orlando gaunal50, afyappa... horacioricardopalma, celeste cuesta...jajaj....
"Le preguntaron ¿cómo te llamas?,
y no animóse a dar su nombre... pues sabe que es vergonzoso, llevar el nombre cobarde...

Abrazo Sopenco...nos vemos en la Plaza, te morís de ganas de ir. Estás invitado.