miércoles, 24 de junio de 2009

El asesino del juez Quiroga... con cargo de conciencia

Post de Raúl Argemí, ex cuadro del ERP, en su blog
Nadie dijo que vivir sea fácil, pero tampoco hay un cartelito al comienzo del camino que advierta que es muy difícil, y casi siempre teñido de injusticia.
Yo, tengo que admitirlo de una puta vez, no he terminado de cruzar los infiernos y dudo de que alguna vez lo consiga. Supongo que a todos nos pasa lo mismo, o no. Feliz de aquel que no.Cada paso que he dado me pesa como de plomo derretido, pero… a veces la vida es generosa y nos encontramos con un premio que nos cuesta festejar, porque las pérdidas han sido muchas.
No creo en la virtud de los arrepentimientos porque no cambian la historia. Quiero suponer que, a veces, tal vez porque alguien en alguna parte del mundo de los muertos nos quiere, en medio del naufragio nos tira una soguita, y es de hijos de puta mal nacidos no agarrarla.
Ellos, los tres, me dicen que quererlos y desangrarme por ellos es lo único que vale. Por sus sonrisas, por sus enojos, porque son una apuesta por la vida.
Tal vez esta confesión sea hija de los tres o cuatro pacharán que me he mandado al buche esta noche. Tal vez. En todo caso, ellos, los tres, son la gente que más quiero en el mundo.Boludeces, sí, que sobrio no volveré a repetir.
Un premio que de ninguna manera he merecido, pero están allí; para quererlos, inocentes de todos los infiernos.

3 comentarios:

Kaspar dijo...

Es recomendable el cargo de conciencia. Pero no ha confundirse con el arrepentimiento. Hubo de ambos en Sudáfrica:"Yo hice tal cosa y me arrepiento". Hubó sí, sanciones morales. No hubo sanciones legales para los arrepentidos. Nos falta ese coraje. En forma brillante, el fallecido Dr. Florencio Varela lo explico en una charla que diera en AUNAR. La negación de los hechos es la podredumbre que mantiene abierta la herida.

Anónimo dijo...

Breve Biografia de Wikipedia:
Raúl Argemi, nacido en La Plata, capital de la Provincia de Buenos Aires, Argentina, Raúl Argemí se dedicó tempranamente a las artes escénicas como autor y director teatral. A comienzos de los años ´70 participó en la lucha armada en Argentina, militando en el ERP-22 de Agosto. Vivió en la clandestinidad hasta que fue detenido en 1974 junto a otro integrante de aquella organización, Marino Amador Fernández, por el asesinato del juez Jorge Vicente Quiroga, crimen cometido el 28 de abril de ese año. Pasó toda la dictadura del gobierno militar argentino encarcelado, y tras su caída y el regreso de los gobiernos democráticos recuperó la libertad en 1984. Es en ese momento cuando comienza a hacer periodismo, actividad que nunca abandonó. Durante su estancia en la Ciudad de Buenos Aires fue jefe de Cultura y director de Claves y colaborador en la Edición Cono Sur de Le monde diplomatique. En 1986 se traslada a la Patagonia, donde trabaja en la prensa regional. La fuerte impronta del paisaje de esta región austral del mundo lo atrapó: la mayoría de sus novelas tienen a la Patagonia como escenario.

En 2000 se traslada a España, país en el que su carrera de escritor da un salto y publica asiduamente sus novelas, muchas de ellas resultado de largos años de elaboración durante su vida en la Patagonia. De la mano de sus libros, comienzan a llegar los premios y las traducciones para otros países de Europa.

¿Es otro terrorista que se arrepiente de haber sido un joven idealista?

Kaspar dijo...

El general Manuel Contreras, jefe de la DINA chilena, presentó un informe con el detalle de los sucedido con cada una de las personas que él había mandado a detener. "Arrojado al mar frente a las costas de Valdivia dentro de un tambor gasolinero con cemento".
Nunca se arrepintió. Peron jamás negó.