Transcribo esta carta linda de Alejandra, pues a mí también anoche me pasó lo mismo. A las doce pensé en los detenidos políticos...yo sé que no están solos, pero a la vez sé que están solos.
Les dejo entonces la carta de Alejandra Canale, la Clr. que, desde su profesión, tanto hace por las Víctimas del Terrorismo...
1º de Enero de 2009 , 10,30 hs.
Mis queridos soldados:
Desperté y necesité escribirles. Anoche nos preparamos para festejar con la familia y los amigos la llegada del nuevo año; todo era impecable, la mesa, las velas, el jardín...el champagne. Habia tanto para agradece: el amor que nos unía, la plenitud de la vida, los logros, los proyectos, la fortaleza y también los duros aprendizajes..
Lo cierto es que la algarabìa se empañaba y silenciaba de a ratos por la presencia latente y de vuestra tristeza, el alma se me estrujaba al pensar en lo que ustedes estarian viviendo, y de pronto necesitaba estar alli, pero no era posible.
No temia a las manos vejatorias de alguna carcelera nauseabunda, quizás libidinosa - bien podia pasar yo por ello estoicamente, casi un mimo comparado con lo que sufren ustedes, con lo que soportan sus mujeres- pensaba en su necesidad de tener a los afectos más cercanos, esos que resultan sostén indispensable en momentos como estos, cuando presos de la injusticia, la maldad y la cobardía que pretende someterlos, se triza el corazón pero se embravece el alma del soldado.
Pensaba en cuántos de ustedes habrian podido tener instantes de intimidad con sus mujeres, sus hijos, sus padres....y el dolor y la bronca escalaban en mi, desvastadores, obligandome a sujetar el odio y el desprecio.
No puedo permitirlo, ellos deben ser para mi el abono que que fortalezca la tenacidad y el coraje para la lucha por la defensa y la difusión de la verdad, por el reconocimiento de las victimas ninguneadas, silenciadas.....
Sé y celebro que cada vez somos mas. Desde la noble furia de Cecilia Pando, quien los defiende desde sus entrañas, la diputada Ginzburg, férrea luchadora en su banca, escritores como Acuña, Massot, Marquez hasta Laje, adolescente y bravo, que cargan con tinta histórica sus convicciones, las cámaras atentas de Palma y Cottini, el acompañamiento y ayuda incondicional de la Unión de Promociones, y tantos otros civiles y militares que comprometidos con la defensa de las víctimas, se juegan y se la bancan.
Ustedes no están solos , por mucho que algunos lo desearan, viven en los corazones de quienes necesitan verlos, libres y felices y reconocidos, quizás pocos entre un pueblo tan ingrato, acomodaticio, pero solo importa que seamos suficientes.
El 2009 me encuentra con la alegría empañada pero con el pensamiento activo y uñas y verba bien afiladas para apoyar y bregar por la lucha por vuestros derechos. La injusticia de sus padecimientos lo amerita.
En cada brindis, en cada abrazo de sus familiares se colará el mio.
Recibanlo, con el afecto que no afloja y la esperanza que anida y sutenta.
Alejandra
Canale
Mis queridos soldados:
Desperté y necesité escribirles. Anoche nos preparamos para festejar con la familia y los amigos la llegada del nuevo año; todo era impecable, la mesa, las velas, el jardín...el champagne. Habia tanto para agradece: el amor que nos unía, la plenitud de la vida, los logros, los proyectos, la fortaleza y también los duros aprendizajes..
Lo cierto es que la algarabìa se empañaba y silenciaba de a ratos por la presencia latente y de vuestra tristeza, el alma se me estrujaba al pensar en lo que ustedes estarian viviendo, y de pronto necesitaba estar alli, pero no era posible.
No temia a las manos vejatorias de alguna carcelera nauseabunda, quizás libidinosa - bien podia pasar yo por ello estoicamente, casi un mimo comparado con lo que sufren ustedes, con lo que soportan sus mujeres- pensaba en su necesidad de tener a los afectos más cercanos, esos que resultan sostén indispensable en momentos como estos, cuando presos de la injusticia, la maldad y la cobardía que pretende someterlos, se triza el corazón pero se embravece el alma del soldado.
Pensaba en cuántos de ustedes habrian podido tener instantes de intimidad con sus mujeres, sus hijos, sus padres....y el dolor y la bronca escalaban en mi, desvastadores, obligandome a sujetar el odio y el desprecio.
No puedo permitirlo, ellos deben ser para mi el abono que que fortalezca la tenacidad y el coraje para la lucha por la defensa y la difusión de la verdad, por el reconocimiento de las victimas ninguneadas, silenciadas.....
Sé y celebro que cada vez somos mas. Desde la noble furia de Cecilia Pando, quien los defiende desde sus entrañas, la diputada Ginzburg, férrea luchadora en su banca, escritores como Acuña, Massot, Marquez hasta Laje, adolescente y bravo, que cargan con tinta histórica sus convicciones, las cámaras atentas de Palma y Cottini, el acompañamiento y ayuda incondicional de la Unión de Promociones, y tantos otros civiles y militares que comprometidos con la defensa de las víctimas, se juegan y se la bancan.
Ustedes no están solos , por mucho que algunos lo desearan, viven en los corazones de quienes necesitan verlos, libres y felices y reconocidos, quizás pocos entre un pueblo tan ingrato, acomodaticio, pero solo importa que seamos suficientes.
El 2009 me encuentra con la alegría empañada pero con el pensamiento activo y uñas y verba bien afiladas para apoyar y bregar por la lucha por vuestros derechos. La injusticia de sus padecimientos lo amerita.
En cada brindis, en cada abrazo de sus familiares se colará el mio.
Recibanlo, con el afecto que no afloja y la esperanza que anida y sutenta.
Alejandra
Canale
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