La vida te da momentos. Y te los
quita. La vida te da oportunidades. A veces. La vida te da amigos. Y te los quita.
A mí me dio un amigo la vida. Lo conocí en el laburo. Niño le dicen todos,
pero es un pichón de Mamut.
Niño, largá el cigarrillo. Niño, largá el
cigarrillo…siete años después…sabés que tenés razón, dejé de fumar porque me
siento mal, apenas puedo caminar… Niño se sintió mal, justo cuando yo estaba en
cama con una bronquitis del demonio. Niño llegó al Hospital. Niño quedó
internado… lo primero que hice al levantarme de mi bronquitis, fue ir ese
domingo a visitarlo a la unidad coronaria. A un amigo no se lo abandona nunca… menos en las peores.
Niño tuvo suerte, la vida le dio
otra oportunidad, angiosplastia y stent mediante. Y yo tengo suerte… pronto me encontraré como
siempre con él, a la mañana muy temprano en la vía, junto a la estación… para ir juntos a solucionarle problemas a
personas que quizás… no se lo merezcan. Pero así es la vida.
Horacio R.Palma
Escribidor contumaz...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario