viernes, 26 de julio de 2013

Carta del hijo del Mayor Olivera, uno de los militares desaparecidos del Hospital Militar

Queridos amigos y camaradas en Cristo: finalmente y de modo imprevisto (todo decía que la sentencia del juicio de mi padre sería en 20 días), hace apenas 5 minutos condenaron a mi padre a prisión perpetua por haber defendido la Patria del terrorismo marxista. Hace cinco años que ya está detenido por esta farsa de juicios.

Se apuraron a dictar la sentencia porque justo estaba en la provincia de San Juan un funcionario del gobierno y querían darle la mayor publicidad posible.

¿Qué pensar a todo esto?¿por qué perpetua?

Quizás sólo haya una respuesta:

Perpetua es la cárcel porque perpetuo fue el amor que tuvo mi padre por Dios y Argentina.

Perpetua porque es perpetua la lucha entre Dios y Satanás, entre Su linaje y el suyo.

Perpetua porque es perpetuo el amor que Dios tiene sobre algunos hombres para que cooperen en la obra de Su Sangre redentora.

Y la alegría es más completa porque a uno como hijo lo abriga la esperanza de recibir algo de esa participación divina; esa corona de gloria, si confiamos en las palabras del Señor en la montaña: “bienaventurados los perseguidos por practicar la justicia, porque de ellos es el reino de los Cielos”.

Les mando un gran abrazo y enviaré vuestros saludos a mi padre y sus camaradas, también ellos condenados como mi padre, a quienes mañana veré en la cárcel para celebrarles la Santa Misa, ese Sacrificio perpetuo en propiciación de los pecados del mundo.

En Cristo y María Santísima

¡Y que Viva Cristo Rey!

Padre Javier P. Olivera

4 comentarios:

capitan futuro dijo...

linda piedra pa la gomera este javito...¿No?

Matilde dijo...

Padre Olivera:
POR TU BONDAD Y TU AMOR,
PORQUE LO MANDAS Y QUIERES,
PORQUE ES TUYO MI DOLOR.
BENDITA SEA, SEÑOR,
CON LA MANO QUE ME HIERES!

Anónimo dijo...

A Jorgito y Gustavo, lo vamos a encontrar, aunque crean que están seguros y protegidos.Porque además tenemos mucho tiempo POR DELANTE. Una década.
Saludos
AVOMPLA
PD: Los fachos por 2 palos por cabeza entregan los riñones de la madre.

Anónimo dijo...

A pesar de lo que se diga, El Sr. Olivera siempre fue para mi y mi padre un hombre respetable... que haya hecho o no lo que dicen... que lo juzgue Dios, que todo lo ve...la justicia argentina dio claros ejemplos de equivocos... yo no puedo saber del pasado de este hombre...pero en su momento conoci a un caballero. No solo murieron y se torturaron a montoneros... era una guerra y del otr bando tambien hubo familias con perdidas...soldados argentinos.
No apruebo la tortura, para nadie!
Escribo en memoria de mi padre, que lo quiso mucho y tenia necesidad de hablar por él.
alejandro.
saludos.