lunes, 17 de agosto de 2009

ACLARACIÓN sobre escritos apócrifos.


Muchas y repetidas veces, escritores famosos han sufrido el escarnio de esritos apócrifos.
Gente que, vaya a saber por qué, se aboca a la tarea de escribir algo y firmarlo con la firma de otro. Por lo general, ese "otro" es alguien conocido.
Le pasó a Borges, quien posee en la red una melosa poesía con su firma... poesía que jamás se le hubiera ocurrido escribir.
Le pasó a Quino, el gran dibujante y humorista creador de Mafalda. También a él le han colgado el "sanbenito" de un cuento que nunca ha escrito.

No es mi intención compararme con ellos. Ni con nadie. Mi única intención es alertar a los desprevenidos, sobre los desesperados manotazos de los acólitos de este régimen de ladrones y corruptos que se cae a pedazos.
El régimen está en retirada. Ellos se irán con los bolsillos llenos... a nosotros nos tocará la pesada pero noble tarea de reconstruir la Patria. Otra vez.

Desde hace varios años... casi nueve, comencé muy despacio pero sin pausa, a intentar levantar la voz. No me resignaba a escuchar la Historia Oficial sin chistar. Intentaron mentirnos la historia. Intentaron tergiversar los hechos. Quisieron que nos avergonzáramos de los soldados que defendieron a la Patria, del ataque terrorista más cruento de la historia Argentina. Intentaron convencernos para que tengamos de "heroes" a los terroristas de ayer.
Por todos los medios, con todos los medios... quisieron sembrar el rencor y hacernos socios de su venganza.
Muchos se encogieron de hombros.
Los ví. Los escuché en mi familia. Los sufrí en mi pueblo.
"Ya está"... "Ya fue...", como dicen los chicos, me amonestaban cuando yo escribía mis peros.

Ya está ¡¡LAS PELOTAS!!!!, yo no estaba dispuesto a encongerme de hombros.

Pensé en la historia que yo había vivido de chico, sí, pero pensé sobre todo en mis hijos. Y en los hijos de mis hijos. Ellos no se merecen la Mentira Oficial.
Luché mi lucha desde una columna de un humilde Semanario del sur de Entre Ríos. Y poco a poco me fui encontrando con un montón de gente que gritaba el mismo grito. Cada uno a su manera. Cada uno dentro de sus posibilidades. Cada uno... como mejor podía.
Pero todos... y digo TODOS, con algo en común: Valentía.

¿Hicimos mucho?.... ¿Hicimos poco?... no importa, lo importante es que HACEMOS.
Y es esto lo que al régimen de corruptos y ladrones, y a sus acólitos, que desde hace tiempo están lucrando con la historia mal contada, con el odio enervado, y con la venganza como destino final y fatal... digo, es ésto lo que les da por las pelotas.
Que a pesar de todo. A pesar los pesares. A pesar de los dolores. A pesar de las limitaciones... a pesar de todo, haya gente que nunca se rindió ante las mentiras ofciales. Ante la historia mal contada. Ante las políticas imbéciles que intentan desde hace tiempo sembrar el odio, pidiendo venganza.
Ellos creyeron que habían ganado. Que habían cerrado la historia. Que nos habían lavado la cabeza. Que nos habían torcido el brazo.
Pero no... acá estamos nosotros pidiendo justicia por las Víctimas del terrorismo de Argentina. Acá estamos nosotros pidiendo libertad a los soldados que combatieron al terrorismo, a los que este régimen ha encerrado por venganza. Acá estamos muchos, y cada vez más, gritando la Memoria Completa. La otra parte de la verdad. La historia que durante años nos quisieron hacer olvidar.
Eso, al régimen, le da por las pelotas. Les revienta el hígado. Los pone "de la nuca"... es que pensaron que su historia de mentiras había triunfado.

Por eso, a mí... que no soy un Borges, ni un Quino, ni escribo en un Diario de primera línea, ni tengo voz en las principales radios, me abren cuentas truchas, me publican avisos en páginas gay, me publican textos apócrifos.
Ya que no nos han vencido, al menos intentan sembrar cizaña.
Hoy me levanto y leo un texto titulado.... "Ni el empate". Alguien lo escribió, y lo firmó con mi nombre.
Imaginen... alguien que se pone a escribir, se sienta frente a la hoja en blanco y se toma el trabajo de la literatura. Y luego lo firma con la firma de Horacio R. Palma, Gualeguay al dia, Gualeguay, Entre Ríos. Y más luego se toma el trabajo de enviarlo a cientos de direcciones de correos electrónicos. ¿Entienden?...

No es porque yo sea Borges, ni editor de La Nación o de Clarín, ni periodista estrella de la AM más escuchada, es decir, no es que están preocupados por mi poder de convocatoria... NO!!!, es sólo porque les da por las pelotas que no nos hayamos callado la boca!!!
Así que los invito a todos... A TODOS... a que sigamos HACIENDO, a que sigamos gritando fuerte, lo que este régimen de corruptos y ladrones, y sus acólitos, quieren que callemos....
MIENTRAS ELLOS ESTÉN PRESOS... YO VOY A ESTAR EN LA CALLE
MIENTRAS LAS VÍCTIMAS DEL TERRORISMO DE ARGENTINA NO SEAN RECONOCIDAS... YO VOY A SEGUIR PIDIENDO JUSTICIA
Horacio R. Palma

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Estimado Palma:

Ud. tiene razón: les dá por las pelotas que no nos quedemos callados, es que en realidad no nos han vencido. Hoy se conmemora el fallecimiento del más grande prócer y reconocido por todos los argentinos. Él también en su época conoció a los enemigos que lo detractaban y lo combatían por la espalda... pero la historia con el tiempo hizo su trabajo, el General Don José de San Martín es el reconocido Padre de la Patria.

Nadie se cree San Martín, sería faltarle el respeto al Gran Capitán, pero algún día este país y su gente deberan reconocer que los soldados, hoy juzgados, nos salvaron de la barbarie.

Para mejor ejemplo basta con echarle una mirada a la situación de nuestra hermana República de Venezuela, azotada por el tirano "loro bolivariano", que no hace otra cosa que mancillar el nombre de Simón Bólivar cada vez que lo nombra para justificar los actos dañinos que le produce a la democracia sometiendo a su pueblo.

Vade Retro Satana!

Analía Alvado dijo...

Horacio, mucho no entiendo de estas cosas, sin embargo, linkear este sitio y publicar algunos de tus post me ha significado cargar con lo mismo que te hacen. No me estoy quejando, sólo trato de decirte que, de la manera que podemos, ayudamos a alivianar el peso.

No estás solo. Un abrazo,
Analía Alvado

Anónimo dijo...

Estimadísimo Horacio:
Ud. sabe muy bien que muchos de los miembros de nuestras FFAA, de Seguridad y Policiales no cayeron en combate,
Fueron emboscados y asesinados arteramente. El enemigo que tenemos actúa así. A mi también me han hackeado el correo haciendo envíos con mi firma.
Como Ud. dice, le da por las pelotas ver que no estamos vencido, sino que por el contrario, vamos camino a la victoria final. Y ellos, al ocaso definitivo.